Ted Bundy: el sádico asesino de mujeres con todo un séquito de fans

Las mentiras en la vida de Theodore Robert Bundy surgieron desde sus primeros años,  al ser acogido por sus abuelos creyendo que estos eran sus padres y que su madre era su hermana.Y aunque siempre fue considerado como un estudiante muy aplicado, en el campus donde conoció a la persona que empezaría a desestabilizarlo para toda la vida. Bundy se enamoró de Stephanie Brooks, cuya ruptura nunca llegó a superar y se convirtió en obsesión.Obsesión que lo llevó a cometer múltiples asesinatos, por los que fue condenado, pero sus dotes de manipulación lo llevaron a conquistar a la prensa.

Su primer víctima, fue la estudiante Joni Lenz, de 18 años, a quién golpeó fuertemente con una palanca metálica, mientras ella estaba en su habitación. Después, la violó con una de las patas de su cama. La joven sobrevivió, pero el ataque le dejó con una lesión cerebral permanente.Casi un mes más tarde, Bundy repitió su 'modus operandi' con una estudiante de Piscología del mismo campus, Lynda Ann. Solo que aquella vez se llevó el cuerpo y lo custodió durante un año entero, hasta que la Policía halló sus restos en una zona montañosa.Su "estrategia" fue revelada: acudía a campus universitarios o supermercados, escogía a su víctima y le pedía ayuda para meter las cosas en su maletero bajo la (falsa) excusa de tener un brazo escayolado. Entonces, golpeaba con una barra a la joven y la metía en su Volkswagen, para trasladarlas a algún lugar apartado en las que les realizaba todo tipo de vejaciones. En algunos casos, tras asesinarlas, practicaba la necrofilia con los cuerpos.

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Ted dejó víctimas a su paso por los estados de Utah, Oregón, Florida y Colorado. Entre sus objetivos se encontraban mujeres menores a 30 años e incluso niñas menores de edad y se calcula que los crímenes se cometieron entre 1974 y 1978.Una de las claves del éxito en sus tácticas, además de su ensayo previo y el victimismo, se debía a sus grandes dotes de seductor y a un atractivo físico que le hizo ganar todo un séquito de fans que lo aclamaban. A las puertas de los juzgados de distintos estados — en los que el joven estaba siendo acusado de asesinato, violación, rapto o todas ellas.Bundy también jugaba con mucho con su aspecto físico, no solo para captar víctimas, sino también para poder huir de la Policía. El joven asesino cambiaba de aspecto siempre que podía para eludir las sirenas policiales.Fue detenido en varias ocasiones por conducir de manera incompetente. Sin embargo, de todas las veces que fue arrestado, dos logró escaparse de prisión.En esa última "escapada", Bundy no seleccionó a una víctima concreta, sino que se pasó por las habitaciones de la Fraternidad Chi Omega de la Universidad de Florida y golpeó a toda estudiante que se encontró con un leño de madera. Tras los salvajes golpes, Bundy vejó, mordió y mutiló algunos de los cuerpos. Su último ataque fue contra una joven de 12 años, con quien volvió a repetir las mismas acciones.

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Bundy también creyó en sus habilidades como abogado, e incluso se defendió a sí mismo durante uno de sus juicios, sin embargo una mordedura en uno de los glúteos de sus últimas víctimas lo que lo sentenció a muerte.Y aunque nunca llegó a admitir toda su culpa. Finalmente, fue ejecutado en la silla eléctrica el 24 de enero de 1989 y declarado muerto a las 7:16 horas a los 42 años, en el condado Bradford, Florida.Ante su popularidad y lo que provocó su historia, fue lanzada una película con su historia donde Zac Efrón funge como protagonista.