El ejemplar apareció cuando olió la comida que un grupo de trabajadores de la construcción calentaban en San Ángel Chipinque.

MONTERREY.-- El aroma de los tacos calentándose sobre el comal hecho con la tapa de un bote, despertó el hambre de un oso, que como en una escena de película apareció en lo alto de una lomita, en la colonia San Ángel Chipinque, en el municipio de San Pedro.En realidad, eran dos plantígrados, pero la timidez del otro impidió que se asomara, aunque los trabajadores de la construcción lo vieron perfectamente.

Según comentaron, a la hora de la comida prenden una fogata y con la tapa de un bote improvisaron un comal donde calientan la comida, principalmente tacos.El aroma de la grasita al calentarse llegó hasta el olfato del oso, que se asomó a ver si lo invitaban, pero no logró convencer a los albañiles, ni siquiera cuando se mostró completo en lo alto del promontorio.Finalmente, los dos osos se retiraron.dat