André-Pierre Gignac no se perdió la Final de Ida de Concachampions ante Rayados, pero las cosas no le salieron como lo esperaba al iniciar como suplente.Dédé viene regresando de una distensión de ligamento en la rodilla derecha. Le tocó estar en el banco durante casi 60 minutos, viendo cómo se disputaba el primero de la serie internacional, con las ganas de estar desde primer minuto en el terreno de juego.Gignac era el jugador más esperado en Tigres para la serie ante Rayados, uno de sus clientes predilectos con seis dianas y prendió a la tribuna del Volcán cuando fue llamado por Ricardo Ferretti para entrar.Ovacionado por 42 mil almas en un Estadio Universitario a reventar, el francés entró al terreno de juego al 59’ por Eduardo Vargas, pero por momentos terminó siendo un espectador más en el área, quien peleaba cada balón buscando reencontrarse con el gol.Los felinos dominaron la parte final del partido, con la posesión del balón, pero con pocas opciones generadas al frente, y casi nulos pases claros para que el atacante galo hiciera de las suyas en el área albiazul.Dédé se movió marcando el pase, pidiendo balones, incluso reclamando una supuesta mano de Nicolás Sánchez ante su primer disparo que llegó al 79’, pero que el árbitro no compró para marcar penal.Las pocas chances que tuvo el conjunto local a la ofensiva hicieron que Gignac no pudiera ser el héroe que Tigres buscó que fuera y que necesitaba en un partido que perdieron por la mínima diferencia.El jugador con el ‘10’ en la espalda otra vez se quedó en cero ante Marcelo Barovero, su verdugo, a quien no le ha anotado en el futbol mexicano y le quitó la oportunidad de festejar una anotación sacando su único disparo a puerta en el cierre del encuentro.