Tigres y América protagonizan el mejor partido de la jornada

A las 7 de la tarde en el Estadio Azteca comenzó a jugarse lo que sería el mejor partido de la jornada: América y Tigres disputaron su encuentro correspondiente a la fecha 6 a la altura de la rivalidad creada durante los últimos años. Desde el 31 de enero de 2015 América no le gana a Tigres, y ahora con este encuentro que terminó con empate 2-2 suma un torneo regular más sin lograr sacar la victoria, pero su presentó argumentos para haberlo conseguido.

América inició el juego con un 4-4-1-1, sus defensores eran Aguilar como lateral derecho, Aguilar y Váldez como centrales, Samudio lateral por izquierda; el centro del campo tuvo a Guido Rodríguez y Da Silva, por fuera Ibarra y Domínguez, de mediapunta Quintero y como delantero Peralta. Tigres tuvo en la banca a Gignac, Vargas y Sosa, tres de las figuras del equipo no iniciaron el encuentro por decisión técnica de Ricardo Ferretti, había dudas de si era o no la decisión correcta, el 11 titular fue con Nahuel en el arco; Chaka, Ayala, Meza y Acosta la línea de 4; JIménez como mediocentro, Zelarayán y Dueñas como interiores; Damm y Aquino extremos, Enner Valencia de 9. El primer tiempo fue mayormente para Tigres, la forma de encontrar las posiciones de tiro era activando a Damm a la espalda de Samudio. Llegar ahí era desde Zelarayán o Dueñas, los interiores alimentaban a los extremos para que luego uno de ellos se quedaba dentro del área acompañando a Valencia. Lo mejor del primer tiempo lo tuvo Tigres, había posesiones muy largas, comodidad con y sin balón, recuperaban y volvían a atacar con velocidad. Hubo oportunidades para ambos lados, y ya en la segunda mitad las cosas cambiaron a favor de América. Se iniciaron los segundos 45 minutos con más presión, cada poseedor se sentía menos cómodo con el balón y el balón se iba y regresaba muy rápido, a América le caía bastante bien este contexto y tuvo oportunidades de frente a Nahuel, tiros de media distancia que no terminaron en gol. Tigres siguió buscando y mediante la búsqueda de posesiones, movimientos de interiorización de Chaka para generar espacios en el carril extremo, se logra colocar en posición de tiro a Enner Valencia. Los últimos minutos estuvieron bastante divididos, tras un 1-2 en contra América pudo empatar con una acción a balón parado, Tigres tuvo sus oportunidades para el tercero de la noche pero no logró concretarse. Hubo variantes tácticas con respecto a lo visto en partidos anteriores, pero lo importante es decir que Tigres regresó a su base 4-3-3 que usaba con Pizarro, Dueñas y Sobis en mediocampo. @edutorresr