El club de stripers ubicado en Portland se vio obligado a cerrar sus puertas antes las indicaciones de la gobernadora al mando Kate Brown; con la finalidad de detener la propagación del coronavirus.Dentro de las actividades permitidas en la ciudad, es aceptado que establecimientos de comida rápida ofrezcan su servicio a domicilio o para llevar. Así es como nació el nuevo negocio Boober Eats.El nuevo servicio de entrega a domicilio consiste en el que un par de stripers con poca ropa entregarán la comida caliente a la puerta de los clientes. Todo comenzó como una broma que se publicó en redes sociales, pero la gente comenzó a preguntar si era real la entrega de órdenes, por lo que el dueño vio potencial al nuevo negocio.Como visionario mientras el resto de la ciudad compraba papel higiénico y pasta el adquirió un Stock de comida en una tienda local.

Desde las siete de la tarde hasta la una de la mañana, Boober Eats ofrece el menú completo por precios accesibles con tarifas de entrega que varían según la distancia.Generalmente los pedidos incluyen alitas de pollo, carne y mini Hot Dogs.Todos los bailarines son escoltados durante sus entregas por un guardia de seguridad, además de que sea establecido la regla de cero contacto y el distanciamiento social para poder continuar con el negocio.Así mismo se les fue proporcionado a los entrenadores máscaras, guantes desechables y toallitas desinfectantes para evitar la propagación.El negocio se mantiene a flote con 25 de los 80 bailarines que trabajaban dentro del club nocturno.El dueño ha asegurado que ha tratado de emplear a tantas personas como le sea posible durante el cierre del club.El personal de cocina preparar las órdenes, los guardias de seguridad llevan bailarines arreglar a realizar los repartos, los camareros ahora están trabajando en los teléfonos manteniendo la redes sociales.Con información de Oregón LiveEM