Cuando el Cartel de Medellín sembraba terror en la década de los 90 en Colombia, el futbol no quedaba exento de los caprichos de Pablo Escobar, antiguo líder de la organización criminal. El ex sicario John Jairo Velásquez, conocido como Popeye, reveló en una entrevista con el diario Popular de Perú, el día en el que Ricardo Gareca, ex jugador argentino que militó en el América de Cali entre 1985 y 1989, pudo ser asesinado por órdenes de El Patrón, quien finalmente le perdonó la vida, pues su afición al balompié era mayor.  

“Se contempló colocarle un coche bomba… (Pablo) tenía en cuenta a todos los jugadores de América de Cali, estábamos en guerra. La Verdad es que Ricardo Gareca siempre estuvo en la mira de Pablo Escobar, sin embargo no llegaron a él. El amor por el futbol del Patrón salvó a Gareca". Ricardo Gareca conquistó dos títulos durante los cuatro años en los que defendió la casaca del La Mechita, disputando más de cien encuentros y anotando 57 goles.SR