Con toda la actividad competitiva parada, el lanzador de martillo Diego del Real buscará dar la marca para los Juegos Olímpicos de Tokio el próximo año.Por lo pronto, se mantiene trabajando desde su casa y aprovechando los tiempos para conocer más habilidades personales.Del Real confía en poder estar en sus segundos Juegos Olímpicos, ahora los de Tokio reprogramados para el verano del 2021 debido a la pandemia por el Covid-19.“La verdad es que sí nos beneficia, tener más tiempo de preparación nos ayuda y nos beneficia en algunas áreas de oportunidad. El problema es el tema psicológico, ya vienes preparado para ciertas fechas y de repente todo se replantea. Es simplemente adaptarse, tengo la fortuna de tener un equipo multidisciplinario muy profesional y de inmediato se replanteó la situación y continuamos trabajando”, dijo Del Real, quien estuvo en el programa INDE Contigo del Instituto Estatal de Cultura Física y Deporte.El martillista, cuarto lugar olímpico en Río 2016, se ha dado a la tarea de conocer aún más a sus rivales y estudiarlos a fondo, además de mantener su preparación física, que dijo realiza en su casa, donde acondicionó un gimnasio.“El secreto está en mantenerse ocupado, el verdadero reto es cuando no encontramos que hacer. Personalmente he encontrado otras pasiones que no había tenido el tiempo de conocerlas. En el tema de los rivales, el principio básico es, no subestimar a nadie. Nosotros tenemos una estrategia que es infalible, el que pega primero, pega dos veces. En los primeros tres lanzamientos tenemos que dar los mejores lanzamientos, y los rivales psicológicamente no te alcanzan”, señaló.DP